¡60 mil millones de litros de gaseosas!

Es la cantidad de gaseosas que consume Estados Unidos en tan solo un año  y no por eso debemos pensar que la realidad es mucho mejor en el resto del mundo, ya que a nivel mundial el consumo de gaseosas es cada vez más grande.
La función principal de las gaseosas debería ser calmar la sed, sin embargo se aleja mucho de la realidad y las características de estas bebidas generan mayores perjuicios que beneficios. Hoy en día se empieza a aceptar que una gaseosa “light” o “sin azúcar” no traerá tantos perjuicios al organismo. Parece que los especialistas en salud se empiezan a resignar a que tomar gaseosas es algo inevitable y por lo tanto las gaseosas “light” serán el mal menor, si bien reduce en gran parte uno de los más perjudiciales lados de estas bebidas no es la solución ideal, ya que los daños que ocasionan las bebidas carbonatadas van mas allá de su contenido de azúcar.
La controversial azúcar
Se encuentra en grandes cantidades aproximadamente 7 a 8 cucharaditas de azúcar en un vaso de gaseosa. Este exceso de azúcar incrementa el contenido calórica de la bebida y aumenta la incidencia de caries. Además  aumenta inmediatamente el nivel de glucosa, originando grandes cantidades  de insulina en la sangre, ocasionando una elevación repentina de los niveles de azúcar sanguíneos y generando aun mayor adicción y necesidad al dulce.

La cafeína, sustancia similar a la nicotina y cocaina
Se encuentra en grandes cantidades, formando una adicción progresiva  en los consumidores. Es una sustancia psicoestimulante, que se encuentra en el grupo de los alcaloides junto con la nicotina y  la cocaína. Actúa como estimulante del sistema nervioso, produce aumento del ritmo cardiaco, ansiedad, dificultad para dormir, aumenta la secreción acida gástrica y la diuresis, en exceso puede provocar nauseas y confusión metal. El consumo de la cafeína en un niño puede afectar negativamente su nutrición, ya que puede estar remplazando alimentos nutritivos y además la cafeína actúa como un supresor del apetito.

El  ácido fosfórico, lo que nunca imaginaste
Es un ácido altamente corrosivo que tiene la capacidad de disolver sales de calcio, magnesio y sodio, entre otras. Se encuentra como ingrediente activo en las bebidas gaseosas para estabilizar el sabor,  junto a gran parte del dióxido de carbono agregado en la gasificación, originando trastornos de desmineralización en las personas que las ingieren.
Desde el momento que se ingiere el acido fosfórico comienza a afectar el organismo, primero entra en contacto con los dientes (especialmente con el esmalte dental) descalcificándolos y volviéndoles más vulnerables a las caries dentales. Luego llega a la sangre aumentando la acidez y alterando el equilibrio de los iones, este desbalance debe ser neutralizado  y para lograr el equilibrio deseado  se utilizan las sales disueltas en la sangre. Ya que la concentración de calcio en sangre es vital para  el correcto funcionamiento del corazón, los nervios y los músculos deben ser recuperadas, y lo logra extrayendo los minerales de los huesos y de los tejidos cartilaginosos.
Otro defecto que presenta el acido fosfórico es la sustracción del hierro,  que luego son excretados y eliminados del organismo, por lo que puede generar anemia por carencia de hierro. Este proceso se extiende a gran cantidad de metales que son indispensables para el cuerpo. Además, los colorantes utilizados en las gaseosas comparten una estrecha relación con los ataques asmáticos y las alergias.



Fuentes de informacion:
 http://www.alimentosargentinos.gov.ar/0-3/bebidas/Ficha_gaseosas_04/Gaseosas.htm
http://www.mundodescargas.com/apuntes-trabajos/salud/decargar_consumo-de-bebidas-gaseosas.pdf

Los transgenicos en la mira

Hoy en día el tema de los transgénicos es muy controversial y se habla mucho más de ellos desde la reciente introducción de ciertos cultivos transgénicos a nuestro país.
Los transgénicos no necesariamente atentan siempre contra la biodiversidad, siempre y cuando existan políticas en su manejo que lo permitan, y no simplemente meterlos al país indiscriminadamente sin leyes y al libre albedrio de cualquiera. Se debe determinar que cultivos son los que convienen sembrar como transgénicos y que zonas se podrían cultivar con estos, para que no atenten contra posibles variedades nativas y contaminaciones genéticas.  
Para el caso del Perú el único cultivo que podría resultar atractivo es el del maíz bt, este maíz tiene la característica de producir por el mismo una toxina para los insectos y que estos no la ataquen, es como si el mismo produjera su propio insecticida. De esta manera ya no se utilizarían insecticidas, produciendo un maíz sin químicos que podrían tener un impacto en la salud a largo plazo, en conclusión un producto más sano, nutritivo y sin agroquímicos que lo contaminen. Al ser el Perú centro de origen y diversificación del maíz y poseer variedades nativas, se deben proteger estás haciendo un mapeo de donde se encuentran estas zonas o regiones  y  liberarlas del maíz transgénico bt, por ejemplo el maíz nativo del Cuzco que se siembra en la sierra es maíz choclo para consumo directo del humano mientras que el maíz bt es maíz amarillo que el humano no consume directamente y que va a formar parte de harinas para la elaboración de miles de productos alimentarios secundarios y ese maíz también forma parte de la alimentación de los pollos , que luego consumimos. El maíz choclo nativo del Cuzco necesita frio y por ende se cultiva en la sierra mientras que el maíz bt transgénico amarillo se podría cultivar fácilmente en la costa sin el peligro que se crucen, de ese modo podríamos nombrar al la región Cuzco "región libre de transgénicos" y podríamos sembrar el maíz bt en la costa de la región libertad, con eso no atentamos contra la biodiversidad ya que un maíz es imposible que se cruce desde la libertad hasta el Cuzco y otra locura mas imposible aun es que el maíz bt transgénico se pueda cruzar con un café, un camu camu o cualquier otra planta que no sea maíz.
Una de las mayores polémicas con respecto a los transgénicos  es la posibilidad de nuevas enfermedades, alergias y hasta cáncer que pueden adquirir las personas luego de su consumo a largo plazo, hasta el momento los estudios realizados no han podido determinar fehacientemente que esto se cumpla, así como tampoco han podido demostrar lo contrario, que no son dañinos y solo recién en algunos años cuando la humanidad ya lleve unas cuantas décadas consumiendo alimentos transgénicas  podremos darnos cuenta de si realmente existe un efecto secundario por consumirlos. Por el momento no podemos hacer nada ya que a pesar de que no los cultivemos en nuestro país, hace rato que los consumimos directa o indirectamente en el aceite de maíz, galletas, mantequilla, carne y leche de soya, fécula de maíz, hojuelas de maíz, embutidos, polenta, fideos, arroz, tomate, trigo, cacao, cítricos, papa, y hasta en los pañales!! Así como también es parte de la alimentación de los pollos, que actualmente el Perú importa porque no es capaz de autoabastecerse, aumentando así los costos de producción de este alimento.
El rendimiento promedio de maíz en el Perú es de 4 toneladas de maíz por hectárea y con el maíz bt los rendimientos aumentan de 30  a 35 toneladas de maíz por hectárea,  además de no utilizar agroquímicos, disminuir costos de producción, produciendo alimentos más sanos y no atentando contra la biodiversidad existente en nuestro país. ¿Por qué quitarle la posibilidad al agricultor de acceder a tecnologías que puedan contribuir con su desarrollo? y al mismo tiempo significar seguridad alimentaria para el país ya que se dejaría de importar el maíz y el precio de muchos productos y sobre todo el pollo seria más barato beneficiándose todos los peruanos con esto. Pero si el estado no es capaz  de asegurar estas condiciones en las cuales los transgénicos no atentan contra la biodiversidad es preferible no arriesgarse.
Gonzalo Velasco Mercon
Ingeniero Agrónomo de Agrícola Tambo Colorado

¡Camina por tu vida!

Un común denominador entre todos nosotros es que siempre nos quejamos de no tener tiempo suficiente para hacer ejercicios y  por lo tanto no podemos recibir sus beneficios (mejorar la salud, bajar de peso, entre otros).

¡Caminando solucionamos el problema! Es una de las formas más sencillas y naturales de hacer ejercicio, donde no hay escusas para no hacerlo y se puede integrar en nuestra vida cotidiana muy fácilmente.

Estudios han demostrado que caminar 30 minutos todos los días o 150 minutos a la semana reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares, presión arterial elevada, diabetes tipo 2, osteoporosis y otras enfermedades crónicas. Fisioterapeutas especialistas en rehabilitación y  reumatología del Hospital Ramón y Cajal de Madrid, explica que esto se consigue al generar mayor aporte de oxigeno a los pulmones y por lo tanto a los músculos, caminar hace que los músculos se muevan y por lo tanto también lo huesos, produciendo una cantidad de calcio suficiente. Asegura que caminar disminuye la presión arterial, tanto la sistólica como la diastólica preservando las paredes de los vasos sanguíneos. En el caso de personas con diabetes tipo 2, se llevo a cabo un estudio en el Centro Nacional de Prevención de Enfermedades Crónicas de Atlanta en Estados Unidos, se estudio 2.896 adultos diabéticos con una edad media de 58,7 años donde se compararon las personas inactivas frente a las que caminaban menos de dos horas por semana y presentaron una reducción en la tasa de mortalidad de 39%, mientas que los índices de mortalidad más bajo se observaron las personas que caminaban entre tres y cuatro horas por semana.
Además, ayuda a mantener un buen estado de ánimo, relajarse, dormir mejor  y para algunos lo más importante incrementa el número de calorías que el cuerpo utiliza, por lo que ayuda a controlar el peso, desarrolla músculos y reduce la grasa en el cuerpo.

¿Cómo empezar?
No tengas miedo caminar es un movimiento natural que prácticamente no produce lesiones, más de la mitad de nuestros músculos fueron creados para caminar.
Tu mismo diseñas tu propio programa de ejercicios, ten en cuenta ir incrementando de poco a poco la frecuencia, duración y distancia de tus caminatas
Lo ideal es caminar a paso ligero, donde puedas hablar sin dificultad, mas no cantar. Trata de dividir la caminata en tres fases, primero camina lentamente, luego incrementa la velocidad y finalmente para enfriar camina lentamente. Si buscas perder peso debes incrementar la duración hasta 60 o 90 minutos y caminar de 5 a 7 veces por semana.
Si te interesa trabajar con mayor intensidad glúteos y los músculos de las piernas camina en pendientes. Caminar en la arena o en el agua (piscina) es también un muy buen ejercicio y de mayor intensidad. Algunos consejos para caminar más son que uses las escaleras en lugar del ascensor, que estaciones lejos de tu lugar de destino, que camines en lugar de tomar un taxi, sacar el perro a pasear  y todo lo que relaciona hacer las actividades cotidianas CAMINANDO.
Datos interesantes de CAMINAR, CAMINAR Y CAMINAR
· Cuando caminas, tus pies topan el suelo más de 1.000 veces cada kilómetro
· 1,200, el  número de pasos en promedio que una persona realiza en 10 minutos de caminata
· 10,000 pasos son 5 millas aproximadamente
                                              

Fuentes de información:
American Journal of health
http://www.fundaciondiabetes.org/adjuntos/04_2006%5C5.pdf
http://www.mhp.gov.on.ca/en/active-living/pedometer/walkingbooks/Pedometer_Spanish.pdf
http://www.hhs.state.ne.us/hew/owh/docs/WalkingFS-Spanish.pdf
http://www.saludhealthinfo.com/Health%20Info%202010/los%20beneficios%20de%20salir%20a%20caminarpdf.pdf